La alfombra del viento

Esta película se pudo ver en la Sección Oficial a Concurso del III Festival de Sevilla, Cine y Deporte.

Esta La alfombra del viento es un filme rarísimo por los países que componen su coproducción, nada menos que el muy fundamentalista Irán heredero de Jomeini y el muy sintoísta y ultratecnológico Japón, dos culturas en principio antitéticas. Su trama gira alrededor de dos miembros de una misma familia, un padre nipón recientemente viudo y su hija, que viajan al país entonces gobernado (con permiso de los clérigos...) por el presidente reformista Mohamed Jatamí, para recoger una alfombra persa diseñada por su difunta esposa y madre.

Las heridas de los dos habrán de restañarse en un ambiente tan distinto al suyo, en una comunidad que se dedica monotemáticamente a tejer alfombras, y que consigue la proeza de fabricar la suya en un tiempo record, aunque es verdad que al espectador tan supuesto poco plazo se le hace más bien eterno.

Kamal Tabrizi, su director, no es ningún recién llegado al cine, y al rodar este filme tenía ya en su haber media docena de películas; pero lo cierto es que, salvo la genialidad de Abbas Kiarostami o la seguridad de Yafar Panahi y algún otro cineasta, el problema es que la generalidad del cine persa hodierno hace de la cotidianidad el arte de aburrir a las ovejas.

(06-08-2014)