Alguien que cuide de mí

Nora es una joven actriz con un futuro prometedor, con una trayectoria que va en ascenso, cuyos amores de su vida son: su abuela Lilith, ya retirada, que en su día fue una de las grandes de las escena, y Cecilia, su madre, cuya carrera profesional va declinando, tras estar en lo más alto. Ambas tuvieron unos grandes éxitos en el mundo del espectáculo.

Se dan cita aquí las cuitas de tres mujeres de sus respectivas generaciones, en las que se manifiesta no sólo el paso del tiempo, sino el cariño y el amor que se tienen entre ellas. Pero Nora descubre que su madre guarda un secreto que la ha marcado durante toda su vida, además de que tiene una mala racha económica y está a punto de ser desahuciada. En estas vidas paralelas ocurre como sucede en el drama de Antón Chéjov, La Gaviota, donde los celos y el amor brota entre ellas.

Cecilia tiene un punto de apoyo en Pedro, un actor veterano, homosexual, retirado, que triunfó como cantante y actor en las compañías de revistas, al que confía sus secretos, miedos y frustraciones. Nora nunca pudo acceder a esa parte oscura de la vida de su madre que tanto ella como su abuela le ocultaron, pero cada vez está más interesada en conocerlo.

El film, pleno de ambición y de buenas intenciones, se inicia con la escena en la que Nora obtiene el Goya como mejor actriz con el discurso de agradecimiento y dedicatoria del premio.

Esta película supone el debut en la dirección de la célebre escritora Elvira Lindo, en colaboración con Daniela Fejerman. Lindo ya había escrito más de una docena de guiones para el cine y series de televisión como el de Manolito Gafotas (1999) o Plenilunio (1999), entre otros, pero esta vez no se ha conformado con escribir el guion de esta dramedia, sino que ha subido un escalón más y ha co-asumido la dirección.

Junto a la trayectoria de estas tres mujeres, transcurre a la vez la relación de Nora con Teo, el actor que le da la réplica en el montaje escénico que ambos ensayan, y en el que el contacto que tienen los personajes se transmite también a la vida real.

Tiene una realización algo teatral, no solo por la referencia a la puesta en escena de La Gaviota, sino porque la cinta está dividida en tres partes tituladas No pueden llamarlo amor, Juntos somos invencibles y Cuando llegué aquí aquella noche, como los actos de una obra escénica.

Posee un guion bien elaborado que lleva de forma bastante lograda estas relaciones paralelas de los personajes y los secretos que se esconden en ellas, lo que mantiene el interés del espectador.

La nueva directora lo ha tenido fácil al disponer de unos actores notables con la joven Aura Garrido como Nora, la excelente Emma Suárez como la madre, y la veterana Magüi Mira como la abuela, con el apoyo masculino de Pedro Mari Sánchez como Pedro, Víctor Clavijo como Teo y Francesc Garrido como el director teatral.