Pelicula:

Gonzalo Bendala es un director, guionista y productor sevillano, en el entorno de los 40 años cuando se escriben estas líneas. Su filmografía comienza en 2003, constando de varios cortometrajes y dos largos de ficción; el anterior a este Cuando los ángeles duermen fue Asesinos inocentes (2015), que tuvo una tibia acogida, tanto crítica como comercial. Su nuevo empeño parece tener mejores referencias críticas, pero me temo que se va a pegar la gran costalada en taquilla, al menos a la vista de la escasa recaudación del primer fin de semana.

Y el caso es que su nuevo film no carece de interés, sin por ello echar las campanas al vuelo: Cuando los ángeles duermen, de hermoso, cuasi naïf título, es un apañado thriller en el que un tipo corriente, el famoso John Doe americano, aquí Juan Nadie, se ve compelido por un cúmulo de acontecimientos a un dilema atroz, que puede cambiarle la vida, sea cual sea la decisión que tome. Nuestro protagonista, Germán, es un cargo medio de una empresa aseguradora; a quinientos kilómetros de su casa, su mujer, Sandra, que ve como de nuevo su trabajo le importa más que su familia, le exige que vuelva para estar en el cumpleaños de su hija; aunque adormilado, el hombre toma un coche de la empresa y se pone en camino. Paralelamente, Silvia, una problemática adolescente del lumpen, se marcha de casa airada para pasar una noche de farra con una amiga y dos tipos tirando a infectos. Pronto los caminos de Germán y de Silvia, inopinadamente, se cruzarán (en este caso, literalmente...).

Tiene Cuando los ángeles duermen buena factura; en ese sentido, se ven los 2,3 millones de euros que, al parecer, ha costado. Está bien narrada por Bendala, si bien es cierto que, como guionista, no le hubiera venido mal alguien que hubiera pulido los diálogos, en general tirando a lamentables, y que hubiera retocado aspectos mejorables de la historia; de hecho, desperdicia la posible interacción entre nuestro protagonista y los dos jóvenes acompañantes de las chicas, lo que hubiera permitido aligerar la larguísima e interminable relación de violencia, verbal y física, entre Germán y Silvia, que termina cansando.

Film que juega a tensionar al espectador y a buscar su identificación con el protagonista, un hombre corriente (aunque con un medio pasar económico, no es un currito cualquiera...), incurre en la tramposería cuando pinta los contendientes de tal manera que el público tenga claro de qué parte está: de un lado, el probo padre de familia que solo quiere llegar a tiempo de dar un beso a su hija pequeña en su cumpleaños y darle su regalo, y cuyo único “delito” es haber dado una cabezada mientras conduce; de otro, una adolescente estúpida, un auténtico quebradero de cabeza en su casa, a la que vemos amenazando con un cuchillo a sus padres, drogueta y con una boca como para lavársela con salfumán, y que, cegada por un odio irracional, quiere hundir la vida al tipo que ha arrollado accidentalmente a su amiga.

Con esa trampería, Bendala juega con las cartas marcadas. Aún así, siendo el dilema planteado tan vidrioso, se permite al menos una mirada no precisamente amable hacia su núcleo familiar, con la connivencia culposa de la mujer de Germán, con su silencio cuando todo vuelva a su ser.

Film irregular, estimulante aunque con cosas mejorables, Cuando los ángeles duermen nos confirma que hay en Gonzalo Bendala un cineasta a seguir, si bien, como hemos apuntado, sería bueno que recabara la contribución de algún guionista de colmillo retorcido que desbastara sus historias, por ahora no precisamente redondas.

Julián Villagrán hace un interesante trabajo, un hombre arrastrado por acontecimientos que le superan, demediado primero entre su deber laboral y su deber familiar, y después en un dilema aún mayor, un dilema moral de resultado (digámoslo ya) abyecto. Marian Álvarez apenas tiene papel digno de tal nombre; para este tipo de personajes, la verdad, mejor hubiera sido optar por una actriz digamos estándar, sin la rara intensidad de la espléndida protagonista de La herida y Morir, aquí claramente desaprovechada. La joven Ester Expósito confirma que, en el casting, debió ser la que más alto chilló: no le vemos mayor mérito, esa es la verdad...


(11-09-2018)


 


Cuando los ángeles duermen - by , Mar 05, 2022
2 / 5 stars
Un dilema atroz