Esta película de título raro y escasamente comercial, De óxido y hueso, está dirigida por el realizador galo Jacques Audiard, autor de más de una veintena de interesantes guiones del cine francés y uno de los más dotados directores del país vecino, habiendo obtenido su fama con títulos como De latir mi corazón se ha parado (2005) y Un profeta (2009), de la media docena que compone su corta filmografía que le sitúa entre los mejores de su promoción.
Ali tiene un hijo de cinco años al que ha de cuidar, pero que apenas conoce. Está sin trabajo y su hermana, que es cajera en un supermercado, los acoge en su casa. Él trata de ganarse la vida como portero de una discoteca, como vigilante nocturno y en peleas clandestinas, ya que fue en tiempos boxeador. En una riña en una discoteca conoce a Stephanie, que trabaja como domadora de orcas en un acuario, quien en un espectáculo ante el público pierde las piernas.
El guion, escrito con Thomas Bidegain, a pesar de basarse en dos relatos cortos de Craig Davidson, que no adapta fielmente, ya que en los cuentos no se conocen, solo toma de ellos su espíritu. Sus personajes siguen teniendo las características de sus film anteriores; son perdedores, viven al límite, los femeninos tienen algún defecto físico, lo que no impide que se enamoren.
Ali y Stephanie tienen caracteres muy diferentes, él ama la libertad, hacer el amor sin compromiso, a pesar de tener un hijo que debe cuidar, que está a punto de perder en un accidente, por no estar más pendiente de él. Ella tiene una idea muy particular de sí misma, le toma afecto y en su mal estado no le pide nada a cambio, más que su amistad, un poco de ayuda y algo de sexo de vez en cuando. La relación entre ellos es atípica, Ali vive a su manera, le cuesta mostrarle su amor, porque no tiene cultura ni costumbre. Son personajes valientes que hacen frente a los problemas, él a la falta de trabajo, ella a la pérdida física tras el accidente, y son capaces de superar las barreras que se le interponen para lograr la felicidad.
Debido a su pasado de guionista las cintas de Audiard se apoyan más en el texto que en la puesta en escena, que suele golpear brutalmente al espectador y a sus protagonistas, a los que castiga duramente. Sus historias suelen ser desagradables, pero interesantes de ver, cuyos personajes se atraen y se repelen, estableciendo una batalla entre ellos y el resultado es que aprenden entre sí.
Cuenta aquí con unos actores magníficos, una espléndida Marion Cotillard que ha sido nominada al Globo de Oro y la película a la mejor de habla no inglesa. Demostrando buenas maneras Matthias Schoenaerts, actor belga de El libro negro, ideal para las peleas aunque a Audiard no le gusta filmar la violencia.
Un melodrama romántico, de amor con mayúsculas, tierno, entre dos seres marginados, pero lleno de dolor y amargura.
Pasó por el Festival de Cannes y ganó tres premios en Valladolid: a la dirección, al guion y al actor Matthias Schoenaerts.
De óxido y hueso -
by Francisco Casado López,
Dec 25, 2012
3 /
5 stars
Un amor diferente
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