El acontecimiento

Con motivo de la concesión del Premio Nobel de Literatura 2022 a la escritora francesa Annie Ernaux, rescatamos la crítica de esta película, adaptación de su libro autobiográfico L'événement.

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El aborto ilegal tiene un largo recorrido en el cine de los últimos cincuenta años (antes, claro está, su presencia fue muy reducida y críptica, como ocurría con otros temas tabúes como la homosexualidad), habiéndose tratado de muy diversas formas en títulos interesantes como Asunto de mujeres (1988), de Chabrol, Las normas de la Casa de la Sidra (1999), de Hallström, El secreto de Vera Drake (2004), de Leigh, o 4 meses, 3 semanas, 2 días (2007), de Mungiu.

Ahora nos llega esta lacerante El acontecimiento, que tiene un plus adicional, el hecho de basarse en la novela autobiográfica L’événement, publicada en 2000 por Gallimard, de la que es autora la profesora Annie Ernaux, reputada escritora que ha obtenido galardones literarios tales como el Premio Marguerite Duras, el François Mauriac y el Marguerite Yourcenar. El tema de su aborto ya lo había tocado Ernaux anteriormente, aunque en un contexto más amplio, en su novela Les armoires vides, publicada en 1974. En la película se nos cuenta la historia de Anne Duchesne (apellido de soltera de Ernaux) cuando, en 1963, se quedó embarazada sin pretenderlo. Comienza ahí una larga, dura, dolorosa carrera contra el reloj para interrumpir esa preñez no deseada, en un país, Francia, en el que en esa época el aborto era un absoluto anatema, siendo aquellos que lo practicaran, por activa o por pasiva, o los que contribuyeran en alguna medida a ello, reos de un grave delito penado con años de cárcel.

Audrey Diwan, la directora del film, era hasta ahora una guionista de cierta relevancia, mayormente en películas de corte romántico o de thriller. Su único film hasta ahora como directora, Mais vous êtes fous (2019), no estrenado en España, era un duro drama, género que parece ser el que más le interesa personalmente, a la vista de este El acontecimiento, desasosegante historia, a fuer de verídica, que Diwan afronta, como ha dicho sobre su novela la escritora e involuntaria protagonista de los hechos, “sin lirismo y sin ira”, solo los hechos, presentados sin cargar las tintas, porque los propios hechos, de por sí, son ya lo suficientemente demoledores como para que la experiencia de la contemplación de la película sea ciertamente perturbadora.

Esa carrera contra el reloj, con esos capítulos identificados ominosamente con el tiempo de gestación de la protagonista (4 semanas, 7 semanas, 10 semanas...), constituye la inusitada fuerza arrasadora de esta cinta, con la impotencia de la chica que busca desesperadamente una solución a su problema, sin que encuentre apoyo ni calor ni en los médicos ni en sus amigas, , sin atreverse tampoco a contárselo a sus padres, en una época en la que el aborto, hoy día una práctica normalizada en Occidente (por más que sea objeto de polémicas), tenía una consideración execrable.

Con escenas de una dureza que mueve a desviar la mirada de la pantalla, como el desgarrador intento de autoaborto infligido por la propia protagonista, El acontecimiento se constituye en un dramático, brutal documento de vocación cuasi histórica sobre una época y una consideración social que hoy nos parecen de corte medieval, pero que ocurría hace escasamente sesenta años en la muy abierta, muy liberal, muy democrática Francia de la V República, la que desde casi dos siglos antes llevaba en el frontispicio de sus valores las palabras Libertad, Igualdad, Fraternidad.

Gran trabajo el de la protagonista, Anamaria Vartolomei, actriz de origen rumano afincada en Francia, en el que, si no fuera por su extrema juventud (22 años cuando se escriben estas líneas), diríamos que es el papel de su vida. Pero tiene mucha carrera por delante, y seguramente hará otros personajes memorables, como éste, en el que se ve que se ha entregado absolutamente. La gran Sandrine Bonnaire tiene un papel poco relevante, que ella resuelve sin despeinarse, como cabía esperar.

Muy merecidamente, la película consiguió, entre otros premios, el León de Oro de Venecia, el máximo galardón del veterano certamen italiano.

(25-03-2022)