A Radu Muntean (Bucarest, 1971) le conocíamos dos de los seis largos de ficción que hasta ahora había realizado, aparte del film que comentamos. Eran Boogie (2008), apreciable crónica de un metafórico Peter Pan, un treintañero que, obviamente, se negaba a crecer, y One floor below (2015), un drama entreverado de thriller con interesantes connotaciones sobre la implicación personal (o no) cuando suceden hechos que se reputan punibles. Ahora podemos ver esta Entre valles, que ciertamente es todo un ejercicio de virtuosismo fílmico, pero al que, nos tememos, le falla la fundamental pata del contenido.
Veamos: la acción se desarrolla en el condado de Alba, en Transilvania, al norte de Rumanía. Un grupo de voluntarios de una ONG de Bucarest viaja hacia la aislada zona de Întregalde, en ese condado, para repartir alimentos entre los habitantes de la zona, necesitados de bienes de consumo de primera necesidad por una pobreza secular. Por el camino Maria, Ilinca y Dan, que van de avanzada en su todoterreno, se encuentran a un viejo que habla de ir a un aserradero que está más adelante. Los tres finalmente deciden llevarlo porque les parece que el anciano no se encuentra bien físicamente, pero cuando el coche se atasca en el barro, las cosas empiezan a torcerse...
Tiene Entre valles una factura espléndida: es cine formalmente del bueno, en el que se suceden los virtuosos movimientos de cámara dentro de largos planos secuencia, en los que los intérpretes se mueven con una coreografía obviamente muy estudiada, aunque parezca de lo más natural. En ese sentido, lo cierto es que el film es irreprochable, y habrá que alabar la extraordinaria planificación en el rodaje que ha hecho que Muntean y su equipo hayan hecho esta prístina joya formal. Está claro que el film participa de ese tipo de cine rumano que desde principios del siglo XXI nos parece uno de los mejores del continente europeo, un cine de percutantes historias realistas contadas con una magnífica envoltura formal
Pero (siempre tiene que haber un pero...) en este caso, en contra de lo que ocurre generalmente en el cine rumano, el tema es etéreo, vacuo, casi inexistente. Porque la hora y media larga de metraje se va en la fútil narración de las peripecias casi de peli de aventuras de estos tres burgueses de la capital que van a repartir comida como si fueran Papa Noel o los Reyes Magos, pero que se encontrarán con importantes dificultades y ya eso no les resulta tan satisfactorio... En puridad, ese es su mensaje, el de la crítica hacia esos voluntarios que tienen sus necesidades más que cubiertas, y cuyo humanismo es en el fondo otro hobby más, como ver partidos de fútbol o ir de compras, pero que, puestos en la tesitura de ayudar de verdad, no dejando tirado a un viejo senil en la noche helada, tendrán serias dudas sobre qué hacer.
Pero no hay mucho más: 104 minutos para esta conclusión se nos antoja demasiado poco tema, aunque esté contado tan exquisitamente, tan cinematográficamente. Porque además Muntean se nos revela, por si no nos habíamos enterado, como un cineasta interesado en delicatessen fílmicas como el fuera de campo, y lo utiliza con profusión; otra cosa es que sea un recurso en este caso más bien prescindible, porque no aporta nada a la acción. Eso sí, de elipsis, ni una: entre otras cosas, nos dan enterito el lavatorio del viejo que se lo hace encima...
Los hermosos paisajes de montaña de la tierra en la que una vez vivió el personaje que inspiró el mito de Drácula, ciertamente actuarán como excelente promotor turístico de la zona de un film cuya escasez de tema le hace caer en uno de los pecados capitales del cine cuando se fía todo en el continente, convertirse en una película monótona, repetitiva y, finalmente, aburrida.
Buen trabajo de los actores, con mucha naturalidad y frescura (aunque se adivina que hay un trabajo ímprobo detrás de ello), en especial del trío protagonista, que han de lidiar no solo con la construcción de sus personajes sino además con la complicada coreografía de cada plano para estar en el momento exacto en el lugar previsto para que las alambicadas tomas salgan perfectas.
(26-11-2021)
104'