Pelicula:

Esta película forma parte de la Sección Oficial del 18º Festival de Cine Europeo de Sevilla (SEFF’2021).

Joana Hadjithomas y Khalil Joreige son una pareja profesional y personal (son matrimonio) que trabajan como guionistas, directores y también vídeoartistas desde finales de los años noventa. Han alternado con eclecticismo el documental y la ficción, con la peculiaridad de que sus documentales tienen siempre algo de ficción, y sus ficciones, algo de documental...

De esta peculiar pareja libanesa, ambos nacidos en 1969 en Beirut y formados al unísono en la Universidad de Nanterre y en la de Nueva York, habíamos visto un curiosísimo documental titulado Lebanese Rocket Society (2012), que nos contaba la peculiar historia de un proyecto universitario de los años sesenta en la capital libanesa para poner en órbita cohetes, más o menos al mismo tiempo en el que los Estados Unidos y la URSS rivalizaban en la carrera espacial, con millones de dólares y rublos, respectivamente, mientras que estos epígonos del país de los cedros lo hicieron con millones de neuronas de sus entusiastas participantes, aunque como era de prever (y más en un país como el Líbano, que ya entonces empezaba a ser una pieza clave en el tablero geoestratégico de Oriente Próximo), eso de lanzar cohetitos al espacio no se veía demasiado bien, hasta el punto de ser finiquitado el proyecto “manu militari” por las autoridades de la época.

Ahora Hadjithomas y Joreige nos traen esta Memory box que es su nuevo film de ficción, aunque, como siempre, tiene también cierto tono documental. La acción se desarrolla en Montreal, en nuestros días, en una familia de emigrantes libaneses cristianos, compuesta por la abuela, llamada Teta, como de setenta; Maia, la madre, en torno a los 45/50 años, y la hija de ésta, Alex, en torno a los 16 ó 17. Estamos en Navidad y están preparando la fiesta cuando llega por mensajería una caja de cierto volumen. Se trata de un envío procedente de París, remitido por una mujer que fue amiga íntima de Maia en su adolescencia y juventud, y que emigró a Francia con su familia ante la dureza de la guerra civil que asoló Líbano en los años ochenta. Alex, la nieta, busca la forma de conseguir enterarse qué contiene la caja, que no es otra cosa que una serie de textos (diarios, libretas), así como fotos y cassettes que su madre le remitió a su amiga relatándole su vida en Beirut, con la guerra al fondo, pero también con sus vicisitudes románticas cuando conoció a Raja, un componente de la milicia falangista del que la entonces adolescente se enamoró...

Tiene Memory box como virtud principal la de ser una especie de memoria sentimental de un tiempo, la adolescencia de la protagonista, pero también de un país, el Líbano de los años ochenta, que sin duda marcaron la vida de la joven Maia, de sus amores y desafectos de aquella época, hecha en forma de gigantesca taracea con los recuerdos que la chica fue manufacturando durante aquellos duros años, y cómo el rescate de ese material servirá para que la hija conozca mejor aquel tiempo aciago en el que su madre y su abuela vivieron peligrosamente, por decirlo parafraseando el título de la famosa película de Peter Weir. Utilizando ese material como una especie de Instagram analógico, reproduciendo con textos, fotos y audios la horrísona realidad del Líbano de la guerra civil, pero también la vida cotidiana de una adolescente, Hadjithomas y Joreige componen un apreciable relato en clave no necesariamente nostálgica de aquel terrible tiempo ya pasado, relato que, es cierto, pierde enteros en la parte final, con el regreso a Beirut, viaje en el que los reencuentros nos parecen de lo más artificial, de lo más poco creíble. Eso sí, nos permite comprobar que el Líbano de la tercera década del siglo XXI ha renacido con fuerza de sus cenizas, un Ave Fénix con todos sus avíos a pesar de seguir siendo un polvorín multicultural, con diversas facciones políticas, religiosas, económicas, etcétera, además de seguir siendo un tablero de ajedrez (ahora en paz, afortunadamente) donde las grandes potencias, pero otras también que no llegan a ese nivel, como Israel y Siria, siguen jugando con sus peones vicarios.

Interesante entonces pero sin tirar cohetes (para eso ya estaba la mentada Lebanese Rocket Society...), la película de Hadjithomas y Joreige queda como una curiosa aproximación a temas tales como la necesidad de rememorar los malos tiempos para reconciliarse con el presente, pero también la forzosa emigración como remedio para huir de la tierra física y moralmente devastada, aunque fuera la tierra amada de los antepasados, la tierra amada de los propios emigrados.

(11-11-2021)


Género

Nacionalidad

Duración

102'

Año de producción

Trailer

Memory box - by , Nov 11, 2021
2 / 5 stars
Memoria sentimental