En el género de la danza hay algunos títulos que tienen como telón de fondo el ballet clásico, en el que sin mucho pensar se nos vienen a la mente títulos como Las zapatillas rojas (1948) o La zapatilla de cristal (1955), por ejemplo. En esta ocasión el que comentamos es Un paso adelante (2022), dirigido por el veterano cineasta francés Cédric Klapisch.
Elise es una bailarina de ballet clásico con un futuro prometedor, que se lesiona durante una función con sólo 26 años y a la que le diagnostican que no podrá volver a bailar, pero ella intentará hallar un nuevo camino en la danza contemporánea. Tras el accidente deja París y se va a la Bretaña para recuperarse en un albergue rural de una ex bailarina, Josiane, que se lesionó, y también ayuda en la cocina.
Allí acuden gentes del teatro, la danza o la música para ensayar, coincidiendo una compañía de danza contemporánea. A Elise la invitan a actuar con ellos si se lo permite su tobillo, concibiendo así esperanza de volver a bailar.
La historia se basa en la idea del deseo de avanzar y obtener algo positivo ante esa adversidad sin importar los esfuerzos que haya que hacer para conseguirlo. El guion ha sido escrito por Cédric Klapisch en colaboración con el argentino nacionalizado francés Santiago Amigorena, con el que ya coincidió anteriormente, que recibió reconocimiento internacional con Algunos días en septiembre (2006), que contaba las jornadas anteriores al atentado del 11-S.
Está dirigido por Cédric Klapisch, el realizador de títulos como Una casa de locos (2002), Las muñecas rusas (2005) o Tan cerca, tan lejos (2019), entre otros, y todos triunfaron en el vecino país francés. Con esta película el director satisface una de sus grandes aficiones como es la danza, arte del que es un apasionado.
El film tiene un prólogo de ballet clásico con la actuación en la que la protagonista se lesiona en esa función. El resto de la trama transcurre prácticamente toda ella en la Bretaña con los ensayos de la compañía de danza contemporánea, lo que motiva que podamos ver algunos números coreográficos que son impresionantes y espectaculares. Y como suele ocurrir en estas historias, tampoco faltan unas gotas de romance amoroso.
Ya en 2010 Klapisch filmó un documental sobre una de las estrellas del Ballet de la Opera de París, Aurélie Dupont, y aunque trató de convertirlo en una película, falló el proyecto. No era esa idea la primera ni esta creemos que vaya a ser la última, y en aquella ocasión hizo amistad con el coreógrafo y bailarín Hofesh Shechter, al que le ha pedido que en Un paso adelante (2022) se interprete a sí mismo.
El protagonismo recae en Marion Barbeau, que es la primera bailarina de la Ópera de París, que debuta en el cine, en el papel de esta luchadora tras la muerte de su madre, que aprende a vivir con sus debilidades.
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