Pelicula:

Fernando Colomo fue el principal artífice de la llamada Comedia Madrileña, epifenómeno cultural que precedió a la denominada Movida Madrileña, caracterizándose esa Comedia Madrileña por la irrupción de personajes e historias acordes con la época en los que se rodaron esas películas, a partir de mediados de los años setenta y hasta los primeros años ochenta, en ese tiempo un tanto difuso de la Transición, en la que una nueva generación de gente que había vivido en su juventud los estertores del régimen franquista, se hacía con el poder político, pero también dominaba la escena económica, social y artística.

El baluarte principal de esa Comedia Madrileña, como decimos, sería el también matritense Colomo, primero con desinhibidos cortos como Pomporrutas imperiales (1976), y después con largometrajes como Tigres de papel (19877), que sería el estandarte del movimiento, descubriendo a una serie de intérpretes que dominarían la comedia española de las siguientes décadas, como ocurriría con Carmen Maura; su cine, sin embargo, se fue desinflando progresivamente con títulos como ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como este? (1978), el thriller La mano negra (1980) y la comedia más o menos existencial Estoy en crisis (1982).

A finales de los años ochenta, tras varios fiascos como la muy costosa (y escasamente taquillera) El caballero del dragón (1985) y Miss Caribe (1988), Colomo prueba suerte con la adaptación de la entonces muy exitosa comedia Bajarse al moro, original del dramaturgo José Luis Alonso de Santos, que había triunfado en los escenarios, retratando acertadamente a un cierto tipo generacional, el de jóvenes que gustaban de fumarse un canuto (recordemos al alcalde Tierno: “el que no esté colocado, que se coloque...”) y para ello deciden viajar a Marruecos a pillar “costo”.

Pero el resultado de la adaptación (que acometieron el propio Alonso de Santos, junto con el director y con Joaquín Oristrell, este en uno de sus primeros guiones para el cine) distó mucho de ser bueno. Lo que sobre las tablas era fresco y directo, en cine, a pesar de las buenas maneras como realizador de Colomo, quedó un tanto artificial e inverosímil, poco creíble.

En puridad se trata de la historia de un triángulo amoroso, siendo sus peculiares personajes o vértices una "vaginera" (que transporta desde Marruecos hachís en salva sea la parte...), su novio, a la sazón policía (que ya es imaginación) y una pánfila maciza pero virgen, con un problema por resolver: cómo desvirgarla para que deje “sitio” a la mercancía... Todo ello con un ternurismo final muy pasado de rosca.

Una lástima, con tan buen reparto: Verónica Forqué y Aitana Sánchez Gijón, entre ellas, además de la impagable Chus Lampreave, y entre ellos, un Antonio Banderas que todavía no se había lanzado a la aventura americana, además del siempre fiable Juan Echanove y el imprescindible Miguel Rellán, uno de nuestros más sólidos secundarios. Bajarse al moro fue nominada a 6 Premios Goya, sin conseguir ninguno de ellos.


Bajarse al moro - by , Jun 25, 2019
1 / 5 stars
Un peculiar problema de transporte