A veces las coproducciones entre países diversos arrojan curiosos resultados, y desde luego con más frecuencia de la debida la unión de dos ratones no supone la creación de un oso, ni mucho menos. Algo de eso ocurre con esta “Flecha negra”, en la que dos raquíticas productoras, una española y otra norteamericana, unieron sus esfuerzos para supuestamente realizar una gran película de aventuras, quedándose sin embargo en una historieta más o menos divertida y entretenida, pero en ningún caso la superproducción ambicionada por sus mentores.
John Hough es un cineasta británico especialista en el género terrorífico, donde ha conseguido algunos títulos de cierto valor, como “La leyenda de la mansión del infierno”. Aquí contó con un guión de Alberto Vázquez Figueroa, novelista de gran popularidad aunque de talento más bien escaso, y con un tema relativamente conocido, ambientado en la Inglaterra del siglo XV durante la Guerra de las Dos Rosas, que enfrentaron a muerte a las familias York y Lancaster por la posesión de la Corona. En este contexto aparece un aventurero, Flecha Negra, que será la bestia ídem de los York. Falto de presupuesto y de credibilidad, el filme simplemente se deja ver si no es demasiado exigente.
Da cierta pena ver metido en este empeño al que fuera en su momento nuestro más internacional actor, Fernando Rey, y también a ese pequeño pero formidable intérprete que es Donald Pleasence. Oliver Reed, ya en el ocaso de su carrera, encabeza un reparto ciertamente descafeinado en sus restantes participantes.
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.