CINE EN PLATAFORMAS
ESTRENO EN HBO MAX.
Disponible también en Netflix, Apple TV, Movistar+, Rakuten y Google Play Movies.
Leticia Dolera es una actriz barcelonesa que desde hace algunos años viene manteniendo también una interesante carrera como directora y guionista; alguno de sus cortos, como Lo siento, te quiero (2009), ha obtenido varios premios, y su primer largometraje como realizadora, este Requisitos para ser una persona normal, fue galardonado en el Festival de Cine Español de Málaga, tuvo nominaciones a los Premios Goya y fue, en general, bien acogido por la crítica.
María de las Montañas, a los treinta y tantos años, se da cuenta durante una entrevista de trabajo de que no es una persona normal, porque no cuenta con todas las características que han de tener las personas normales: trabajo, casa, pareja, vida familiar, aficiones, vida social, ser feliz. Ella no cumple ninguno de esos requisitos; cuando encuentra a Borja, un chico entrado en kilos que está obsesionado con adelgazar, ambos sellan un pacto: él la hará encontrar todas esas cosas que la convertirán en “normal”, y ella le ayudará a reducir su sobrepeso. Pero, claro está, los pactos, como las escopetas, las carga el diablo...
Requisitos para ser una persona normal es una comedia divertida, más de sonrisa que de risa, fresca e inteligente. También, es cierto, previsible y poco original, porque, aunque el planteamiento es sugestivo, su nudo y desenlace va por caminos más bien trillados. Eso no quita para que sea una película que caiga irremediablemente simpática, con sus modernidades en forma de plasmar en pantalla, junto a los personajes, letreros sobre las cualidades de ser normal que cada uno de ellos cumple, lo que hace la protagonista comparándose constantemente con los demás, para ver si los otros son, o no, “personas normales”, lo que quiera que ello sea.
Claro está que la normalidad, y no digamos la felicidad, no estará en cumplir reglas o normas, sino en algo más evanescente: por ejemplo, a lo mejor está en un gallego gordo y pelirrojo, de barba hirsuta y humor algo esquinado; a lo mejor está en no sentirse urgido a ser normal, a ser feliz, sino simplemente en serlo.
Rodada la película con apreciable solvencia por Dolera, nos gustaría verla en empeños de más enjundia. Requisitos..., como ópera prima, está bien, y nos muestra a una cineasta con ideas, una mujer talentosa que puede dar mucho juego, a poco que vaya creciendo también como directora, como ya lo ha hecho como actriz. En esta última faceta su trabajo es muy matizado, componiendo un personaje que, aunque no esté escrito en clave realista, sabe a real, a auténtico, en su cierto desamparo existencial, en su desnortamiento treintañero cuando no sabe muy bien qué hacer con su vida.
El descubrimiento actoral es Manuel Burque, todo un personaje, al que después hemos disfrutado, en roles no demasiado distintos (y es que tiene un problema de limitación física evidente...), en las series televisivas Buscando el norte y Cuerpo de élite. Llama la atención ver a Miki Esparbé, al que generalmente le adjudican los papeles de pagafantas y amigo carajote del protagonista, aquí como “tío bueno” y pareja perfecta (quizá no tanto...). Notable reparto de secundarios, tanto jóvenes, como Alexandra Jiménez, una de las mejores actrices españolas de su generación, como maduros, como José Luis García Pérez, Silvia Munt y Carmen Machi.
(02-10-2018)
82'