Uno de los géneros que a nuestro entender suelen nacer lastrados desde el comienzo es aquel que trata de aventuras en el desierto. Pocas películas consiguen saltar esa barrera que supone andar kilómetros y kilómetros por las arenas del desierto en unas aventuras que, por lo general, resultan increíbles y casi nunca se libran de la monotonía y la pesadez de muchos minutos metidos los protagonistas en las mortales circunstancias de no tener agua y estar bajo un sol de justicia el frío nocturno de pocos grados.
En esta ocasión se han adaptado dos libros de Laurens van der Post, en donde se recogen las aventuras de dos jóvenes adolescentes que, tras quedar huérfanos al ser sus padres asesinados en una granja a manos de unos traficantes de colmillos de elefantes, se ven abocados a cruzar el desierto del Kalahari en compañía de un bosquimano.
La película tiene una clara vocación de denunciar los desmanes de unos hombres que tratan de comerciar con la naturaleza y los animales, provocando la muerte de éstos para enriquecerse; pero una película no se logra sólo con buenas intenciones, ya que la aventura que en ella se nos relata no resulta muy creíble, al mismo tiempo que, como hemos dicho antes, se hace lenta y pesada, en largo caminar de estas tres personas a lo largo del desierto. Esto no quita para que posea una bella fotografía del español Juan Ruiz-Anchia y una espectacular música de James Horner.
Un lugar muy lejano -
by Francisco Casado López,
Nov 24, 2012
1 /
5 stars
No bastan las buenas intenciones
Uso de cookies
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.