Pelicula: Estamos ante todo un clásico del cine de terror, nada menos que el tercer filme que Terence Fisher, renovador del género y maestro del cine de atmósferas, realizó sobre el mito de los vampiros. Tras “Drácula”, la formidable revisitación del siniestro pero fascinante personaje al que dio forma Bram Stoker en su novela, Fisher todavía dirigiría dos filmes más sobre el tema, ambos también de gran altura, “Las novias de Drácula” y este “Drácula, príncipe de las tinieblas”. La fama de Fisher se consolidó con esta trilogía vampírica, pero realmente su cine abarca casi todos los mitos del género, desde la momia al monstruo del Frankenstein, pasando por el hombre-lobo.
“Drácula, príncipe de las tinieblas” parte del nudo argumental ideado por Stoker, que formaba la trama de las anteriores entregas del cineasta británico. Dos parejas hacen caso omiso de las advertencias y se encaminan al castillo del conde Drácula. Tras un accidente no del todo fortuito, son recogidos por un macabro personaje. Lo mejor de esta secuela de “Drácula” es la espléndida atmósfera de misterio, horror sobrenatural, y sin embargo, elegancia, que destila el filme, tan lejos de los efectismos de las malas películas actuales de terror.
A la sutil ambigüedad de la obra no es ajena la composición del personaje principal que hace Christopher Lee, el actor que mejor ha sabido interpretar el maléfico a la vez que sugestivo noble transilvano, hasta el punto de que los rasgos del vampiro por excelencia han tomado ya, en la memoria colectiva de los espectadores, la imponente faz del actor inglés. Filme muy recomendado para los aficionados al género de terror. Los que no lo sean, sepan que este es terror químicamente puro, ajeno a los despanzurramientos instituidos por serie abyectas como “Viernes 13”, “Pesadilla en Elm Street” o las más modernas “Scream”, “Sé lo que hicisteis el último verano” y otros epígonos.

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Duración

90'

Año de producción

Drácula, príncipe de las tinieblas - by , Aug 15, 2006
4 / 5 stars
Misterio, horror, elegancia