Un muy interesante film de intención psicológica es lo que ofrece este El otro señor Klein, una de las últimas obras de interés de Joseph Losey, un realizador norteamericano, autor en su país de películas del calibre de El muchacho de los cabellos verdes y El merodeador, que tuvo que exiliarse a Inglaterra a raíz de la persecución que sufrió por el Comité McCarthy de Actividades Antiamericanas. En Europa hizo obras tales como El criminal, Eva, El sirviente (seguramente su obra maestra), Patria y rey y El mensajero. En los años setenta sufrió una crisis de creatividad, remontada primero con Una inglesa romántica y después con el film que comentamos.
Un joven marchante de arte, en el marco de la ocupación nazi de París, encuentra un día un ejemplar del opúsculo “Noticias judías” en su casa. Él es de origen centroeuropeo, y no tiene antecedentes hebraicos. Alguien, un taimado sosias, está urdiendo a sus espaldas una historia que puede acabar con él...
Losey realizó una inquietante aproximación al tema de la doble personalidad, pero también al miedo que acongoja cuando se desconoce cuáles son los invisibles hilos que el destino mueve, y contra los que nada se puede hacer. Hay también una denuncia del racismo cotidiano, pero no es lo más importante.
Obra sólida, de difícil comprensión en toda su extensión, puede seguirse sin embargo como la película de intriga que superficialmente es, y no defraudará. A ello contribuye el notable guión de Franco Solinas, la depurada realización de Losey, en uno de sus trabajos más personales, y la interpretación de Alain Delon, a su vez productor del film.
(09-05-2011)
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