Vaya por delante que el titulillo de esta crítica no quiere decir en absoluto que este film intente aprovechar el éxito de la serie televisiva. Ya ha explicado Antonio Cuadri, y es así, que la génesis de la película es claramente anterior al serial protagonizado por Imanol Arias. Conocí a Cuadri hace un cuarto de siglo, cuando ambos coincidimos durante un año entero en un curso de iniciación al cine; creo que no he vuelto a verlo más, así que me veo con las manos libres de influencias, incluso inconscientes. Entonces Cuadri ya presagiaba que sería alguien en el cine. El tiempo ha venido a dar la razón a aquella intuición de los casi pipiolos que alguna vez fuimos.
También es cierto que esta Eres mi héroe no será, seguramente, su mejor película. Confirma su solvencia como profesional del cine (el film es irreprochable desde el punto de vista técnico, incluso con una recreación bastante plausible, ayudado por la infografía, de la Sevilla de 1975), pero ciertamente le falta alma, y, desde luego, un mínimo hilo conductor. Porque a esta historia de crío que se asoma a la adolescencia, harto de mudanzas anuales siguiendo el trabajo de su padre, le falta un eje central que le dé la coherencia que no tiene: lo mismo se centra en el temor cerval del pequeño hacia los matones de la clase que en la tímida iniciación sexual con una compañera, que en un confuso batiburrillo político (que recuerda, eso sí, con bastante verosimilitud, aquella sopa hirviendo que fue la Transición), y, para remate de los tomates, un compañero imaginario de juegos, que resulta ser Antonio Dechent haciendo, literalmente, el indio...
No ha sido bueno el resultado, y es una pena, porque el tiempo histórico de la lucha por la libertad en el tardofranquismo es un territorio en el que todavía queda mucho por decir. Tampoco parece haber sido una buena elección la de Manuel Lozano, el inolvidable chico de La lengua de las mariposas, que aquí se pasea con cara de pasmado, pero sin que terminemos de creernos que es ese chico traumatizado por tantas cosas que, finalmente, consigue lo que quiere. Lástima de oportunidad desperdiciada...
(04-06-2003)
100'