Cuando se rodó esta Top Gun, Tom Cruise era solo una promesa del cine norteamericano; se había iniciado con papelitos secundarios en Amor sin fin y Taps, más allá del honor, había intervenido en un éxito “indie” en la coppoliana y coral Rebeldes, además de tener repercusión entre el público adolescente con Risky Business, y un fracaso estrepitoso con la esperada (y tan decepcionante) Legend, de Ridley Scott. Estaba todavía muy lejos de convertirse en uno de los hombres más poderosos de Hollywood, con una carrera como actor que, a la fecha en la que escribimos estas líneas, ronda ya los doce mil millones de dólares de recaudación en las taquillas de todo el mundo.
Top Gun fue uno de sus primeros grandes éxitos: de hecho, con un modesto presupuesto de 15 millones de dólares, recaudó en todo el mundo más de veinte veces esa cifra, comenzando con ello a cimentar su fama y su posterior poder. Recientemente, algunos fiascos en taquilla le aconsejaron desempolvar el tema y la continuación Top Gun: Maverick (2022) se ha convertido en una de las cintas más taquilleras del año, con una recaudación que ya supera los 1400 millones de dólares, confirmando que su nombre sigue vendiendo, y de qué forma.
Unos títulos de crédito iniciales informan de que en 1969 la Armada creó una escuela de pilotos de combate conocida coloquialmente como Top Gun. La acción inicial se sitúa en algún lugar del Océano Índico, en el tiempo cuando se rodó la película, a mediados de los años ochenta. Un portaaviones norteamericano detecta un caza enemigo, un Mig (los antiguos aviones de combate de la URSS), por lo que encargan a la patrulla del teniente Pete Mitchell, conocido por todos por su nombre clave, Maverick, que investigue. Maverick es conocido por su indisciplina, su rebeldía y por actuar siempre con un criterio propio (no siempre acertado) al margen de las órdenes, y en esta ocasión de nuevo monta el numerito, si bien su heroísmo permitirá a un compañero presa del pánico volver hasta el portaaviones. Sus superiores lo envían entonces a la localidad californiana de Miramar, a la escuela de pilotos, conocida como Top Gun, esperando que allí lo embriden... Lejos de ello, enseguida Maverick se muestra como un piloto intuitivo y talentoso, pero también muy reacio a cumplir lo que se le ordena; paralelamente, conoce a una chica en el bar que frecuentan los pilotos que resulta ser... uno de sus instructores...
Top Gun (a la que en la España de la época, escasa en conocimientos de inglés, le añadieron el subtítulo Ídolos del aire) es, evidentemente, un producto típico de la etapa presidencial de Ronald Reagan (1980-1988), un tiempo en el que funcionó, y de qué manera, un resurgimiento cinematográfico de lo más conservador del país, tras la humillación nacional que supuso el secuestro de sus diplomáticos de la embajada en Irán. Ese renacer patriotero y militarista en el cine yanqui tuvo algunas de sus bazas más evidentes en la saga iniciada por Acorralado y continuada por Rambo, pero también, aunque en un tono más difuso, en productos como este Top Gun, que buscaba (y lo consiguió) poner de moda a los pilotos de combate de la US Navy, con sus bonitos uniformes blancos y su heroísmo de pitiminí, ese heroísmo de película que lo aguanta todo.
Producto entonces militarista pero no excesivamente, es también una historia romántica, con la peculiaridad para la época que ella, lejos de ser la típica jovencita mona y hacendosa que se estilaba en aquellos tiempos, es una profesional de primer nivel y, encima, es una superior jerárquica del protagonista. Es cierto que más allá de esa (cierta) osadía, después la historia romántica es más bien tópica, como la propia historia central del film, con los traumas que irán acumulando el protagonista, hijo de un piloto de la Armada al que desea reivindicar a toda costa, pero también sintiéndose responsable de la muerte de su amigo más íntimo, la única familia que en realidad tenía, por una decisión en vuelo de la que se considera culpable.
Ese complejo de culpa, en una historia más bien simple, con traumas infantiles como la desaparición del padre-héroe y la autoculpabilización por la muerte del amigo querido, se constituirá en la línea central del film, con un desenlace obvio en una película de este corte y de este tiempo, y con la correspondiente escena de acción bélica final, plena de adrenalina.
Hay, es cierto, un canto a la rebeldía simpática de Maverick, que es una mezcla infernal de indisciplina y pericia. A la vez, mezcla la épica de la guerra, o de la preparación para la guerra, con la historia romántica, en una película que, ciertamente, cuenta con una filmación efectiva aunque no demasiado personal de Tony Scott, experto en films de acción como éste, con escenas rodadas con pericia, teniendo en cuenta que entonces no había efectos digitales sino analógicos. Es cierto que las escenas de vuelo son un tanto tramposas, están más habladas que mostradas, resultando con frecuencia bastante confusas, pero el conjunto funciona razonablemente.
Mención especial al aspecto llamémosle exhibicionista del film, con sesión de musculitos de los pilotos jugando a vóley playa, en una escena que su continuación, Top Gun: Maverick, no se resistió a volver a poner en escena. Hay también toda una épica de los despegues y aterrizajes de los cazas F-18 en los portaaviones, con una estética muy "macha", si sirve el adjetivo, y con todo el mundo chorreando siempre sudor (menos las mujeres, eso sí...).
Un final épico, del tipo “qué grandes somos”, cierra una película que ciertamente no tiene grandes valores cinematográficos y sí intencionalidades más bien políticas, pero que en su conjunto, y haciendo abstracción de éstas, resulta una película apreciable, sobre todo revisada casi cuarenta años después, cuando las adherencias del momento ya hace tiempo que desaparecieron.
Apañado reparto: al margen de Cruise, que por aquel entonces estaba todavía bastante crudo como actor, aparecen algunos secundarios notables, como Tom Skerritt, y algunos actores y actrices que después han tenido carreras mucho más interesantes, como Meg Ryan y Tim Robbins.
(25-11-2022)
110'