Pelicula:

Antiguo actor infantil reciclado en director, Ron Howard es el buen servidor de los grandes estudios, que rueda toda clase del films, se atreve con todos los géneros y casi siempre logra el favor del público. Ahora le han encargado una de “sabio loco”, la típica biografía del genio incomprendido, que lo pasa fatal, que sufre un montón, hasta que al final logra su merecida recompensa, esta vez nada menos que consistente en el premio Nobel.


El biografiado en cuestión es John Nash, matemático y científico, cuya vida fue mucho más problemática de lo que ya de por sí vemos en pantalla, con oscuros episodios y lances desagradables que aquí han sido suavizados o eliminados. La película narra un largo trecho de su vida, desde que llega a la Universidad de Princeton en 1947, hasta la entrega del Nobel en 1994. Ejemplo claro de cine superficial, que sólo busca la comercialidad, la película incurre en toda clase de tópicos, frases altisonantes con falsa solemnidad, engaños de guión y machacona partitura de James Horner, de esas que quieren subrayar en cada instante lo sublime que es la escena. La probada esquizofrenia de Nash sirve de trampa recurrente a los guionistas y al director para despistar al espectador, en especial toda la ridícula trama de los rusos perseguidores. Sólo las escenas familiares, con una excelente Jennifer Connelly, elevan el listón de una cinta fallida, en la que Russell Crowe exagera en lo gestual, pero logra una gran creación en la transformación física y corporal de su difícil personaje.


En definitiva, patinazo del director de Apolo 13, que aquí se ha pasado a la hora de vulgarizar el mensaje, y de buscar taquilla y Oscars por encima de un mínimo de rigor, para contar con seriedad la dolorosa historia de una vida sin tantos brillantes numeritos como vemos en pantalla.


 


Una mente maravillosa - by , Feb 29, 2024
1 / 5 stars
Empanada mental