Enrique Colmena

El estreno con solo unas semanas de distancia de dos nuevas versiones de la novela corta de Henry James La bestia en la jungla, a saber, la así titulada en nuestro país, La bestia en la jungla, del austríaco Patric Chiha, y la en España titulada The beast (La bestia), siendo el original francés La bête, con dirección del galo Bertrand Bonello, vuelve a poner sobre la palestra la actualidad (y, consecuentemente, la modernidad) de este célebre escritor anglo-norteamericano (Nueva York, 1843 - Londres, 1916). Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid (o que el Támesis pasa por Londres, que es más apropiado hablando de James...), vamos a comentar dos o tres cosas que sabemos de él (gracias, Godard), en especial en torno a las adaptaciones al cine y la televisión que se han hecho sobre la obra jamesiana.

Hombre muy viajado desde muy joven por motivos familiares, ya en su edad adulta se afincó en Europa, fundamentalmente en el Reino Unido, llegando a tomar la nacionalidad británica poco antes de morir, lo que confirma que los ingleses, como los vascos, nacen donde les da la gana, por no decirlo de una forma más brutal... Escritor de vastísima obra, se desempeñó como novelista, pero también como cuentista, dramaturgo, crítico literario, ensayista, columnista, traductor... Literariamente se sintió influido a lo largo de su vida por un extenso rosario de referencias de primera línea: Hawthorne, Zola, Turgueniev, Stevenson... su estilo literario se fue haciendo cada vez más complejo, llegándose a definirle como un “escritor impresionista”. Temáticamente gustó del drama en el que contraponía posturas diferentes, tradicionales y liberales, pero también cultivó con frecuencia el relato de terror, o de misterio, con frecuencia de reminiscencias góticas. Un amplio puñado de sus obras tienen relevancia mundial y siguen considerándose como textos de importancia capital en lengua inglesa, desde Los papeles de Aspern a Otra vuelta de tuerca (también traducida en España como La vuelta de tuerca), desde Washington Square a Las alas de la paloma, desde Los europeos a Retrato de una dama, desde Daisy Miller a La bestia en la jungla; esta última, por cierto, quizá una prefiguración angustiada, existencialista, del posterior drama de Samuel Beckett Esperando a Godot, una de las obras claves del teatro del siglo XX.

Su obra, entre el realismo y el modernismo, a horcajadas de las dos orillas de sus dos patrias (la de nacimiento e infancia, Estados Unidos; la de su voluntaria adopción, por cultura e intereses nacionales, Reino Unido), cayó en desgracia en los años posteriores a su muerte, que aconteció durante la Primera Guerra Mundial, pero el tiempo ha vuelto a colocarlo en el lugar de honor que ciertamente merece. El cine, y la televisión, se han hecho eco de ello de una manera notable, tanto cuantitativamente como cualitativamente. De hecho, desde 1933, fecha de la primera adaptación de un texto jamesiano a la pantalla (en concreto la producción cinematográfica norteamericana La plaza de Berkeley, versión de su novela inacabada El sentido del pasado, dirigida por Frank Lloyd), la IMDb censa la friolera de 211 productos audiovisuales (películas, miniseries, teledramáticos y TV-movies) que se han basado, en mayor o menor medida, en textos de Henry James. De ellos, 38 han sido largometrajes de ficción hechos para cine, 47 han sido películas para televisión, y 126 han sido episodios televisivos incluidos bien en series o miniseries, bien en contenedores de teleteatros, como el famoso Studio One norteamericano, obvio referente de nuestro Estudio 1 de TVE.

Siguiendo con las curiosidades numéricas, la década en la que se han llevado a la pantalla grande o pequeña más obras jamesianas ha sido la de los años setenta, con nada menos que 61 títulos, seguida de la de los cincuenta, con 41, y en tercer lugar la de los años sesenta, con un total de 26 títulos.

Como era de prever, los títulos que hemos comentado como más conocidos y reconocidos de la obra de James han sido también los que han acumulado un mayor número de adaptaciones a la pantalla. En concreto, Otra vuelta de tuerca ha sido versionada nada menos que en 41 ocasiones; Los papeles de Aspern, en 20; Washington Square (en varias ocasiones con el título de The heiress, “La heredera”), 16 veces; Las alas de la paloma, en 11 ocasiones; La bestia en la jungla, 5 veces (tres de ellas en los últimos 5 años, más que probable señal de su vigencia); y Retrato de una dama, Las bostonianas, Daisy Miller y la inacabada El sentido del pasado, 4 veces cada una de ellas.

Pero, claro está, no es solo cuestión de números; de hecho, los números en este caso lo único que indican es el interés de la industria cinematográfica y de los profesionales del cine por llevar a la pantalla las obras imaginadas por James, pero sobre todo es el retorno de ese interés por parte del público el que ha hecho posible que, 108 años después de la muerte del escritor anglo-norteamericano, sus textos se sigan llevando una vez tras otra a la pantalla grande o pequeña.

Quizá pudiera pensarse que, al haber sido escritas las obras de Henry James en inglés, las cinematografías o televisiones que no tienen la lengua de Marlowe o Shakespeare como su idioma vernáculo pudieran haber sido menos propicias a su adaptación a sus respectivas nacionalidades, pero nada más lejos de la realidad. Por citar algunos casos, podemos comentar, a modo de ejemplo, las versiones que se han hecho sobre la novela Washington Square en la televisión alemana, con el título de Die erbin (1982), en la RAI italiana, como L’ereditiera (1958), o en la sueca, bajo el título Arvtagerskan (1962), o las que se filmaron sobre Las bostonianas en la televisión francesa con el título Les bostoniennes (1962), o sobre Los papeles de Aspern, tanto en la televisión de la Yugoslavia de Tito con el título Pesnikova pisma (1971) como en la italiana en Il carteggio Aspern (1972), en la de la antigua Checoslovaquia en Listy Juliane (1979), y en la austriaca con el título Briefe eines toten Dichters (1964).

Basten esos ejemplos, entre otros muchos, del interés que la obra de James ha despertado en otras lenguas ajenas a la inglesa. Incluso ha saltado a otros continentes: en Japón se ha versionado una de sus novelas, concretamente Las alas de la paloma, en la miniserie Kin iro no tsubasa (2007), y en Brasil Washington Square, con el título de A herdeira (1953), y Otra vuelta de tuerca, con el título Através da sombra (2015).

Por supuesto, también en España se ha adaptado a Henry James, y además profusamente, en especial durante las décadas de los sesenta y los setenta, cuando Televisión Española, la pública TVE, única televisión en la España franquista (y en la democrática lo fue hasta principios de los años noventa), puso en la pequeña pantalla, a través de estupendos contenedores de teledramáticos como Hora 11, Novela, Ficciones o Estudio 1, un buen puñado de versiones de obras jamesianas. En el primero de esos contenedores, por ejemplo, se pudo ver una adaptación de Las alas de la paloma (1970); en el segundo, en la mítica Novela que amenizaba las tardes de la sociedad española en los años sesenta y setenta, se emitieron versiones de Los papeles de Aspern (con un entonces ya consagrado Fernando Rey, nada menos) y Cuatro encuentros (ambos en 1967), Los europeos (1973), Retrato de una dama (1974) y Las bostonianas (1978), esta última con realización de la veterana Mercè Vilaret y con dos grandes de la interpretación española de la época, Julieta Serrano y Enriqueta Carballeira; en Ficciones pudo verse Los papeles de Aspern, Owen Wingrave (ambas en 1973) y La fortuna de Peter Crawford (1974); en cuanto al legendario Estudio 1, que difundió una impagable cultura teatral en la sociedad española de la época (después sustituida, gracias a TeleCirco, por un amplio muestrario de casquería y podredumbre), en 1972 se pudo ver bajo sus auspicios una versión en formato de teleteatro de Daisy Miller, con dirección del veterano José Antonio Páramo y con Julieta Serrano como la señorita Miller del título.

En sucesivas entregas de esta serie de artículos hablaremos más extensamente de la casi docena y media de títulos de relieve que se pueden espigar sin mucho problema entre la nutrida filmografía que se ha rodado o grabado sobre obras jamesianas.

Ilustración: Léa Seydoux y George MacKay en una escena de The beast (La bestia), de Bertrand Bonello, sobre la novela corta La bestia en la jungla, de Henry James.

Próximo capítulo: La rabiosa actualidad de la obra de Henry James en el audiovisual. Espigando títulos de interés (1949-1974) (II)