Paul Schrader fue uno de los hombres que más esperanzas suscitó en el Nuevo Cine Americano de los años setenta, el que daría nombres fundamentales para la industria de la cinematografía USA del último cuarto del siglo XX y comienzos del XXI: Steven Spielberg, Martin Scorsese, Francis Ford Coppola y Brian de Palma, entre otros. Schrader brilló poderosamente como guionista sobre todo de Scorsese, para el que escribiría los libretos de Taxi driver, Toro salvaje y La última tentación de Cristo; pero también escribió para Sydney Pollack (Yakuza), De Palma (Fascinación) y Peter Weir (La costa de los Mosquitos).
Como director, Schrader tuvo una primera etapa brillante, con títulos notables como American gigoló, El beso de la pantera, Mishima, El placer de los extraños y Aflicción, pero el fracaso en taquilla de varios de ellos lo sumió en el ostracismo profesional, reapareciendo solo de vez en cuando a partir del siglo XXI, y nunca más con títulos de ese nivel.
Años antes de eso, en los setenta, cuando Schrader era todavía la gran esperanza blanca del cine USA a la vez culto y comercial, su segunda película como director sería este Hardcore. Un mundo oculto, denso e impactante drama sobre un hombre cuya hija cae en el turbio mundo del cine pornográfico más tirado. El padre, de convicciones religiosas muy puritanas, se verá arrastrado a un encanallado paisaje para buscar a su hija, llegando a las puertas mismas de lo más clandestino y sórdido: el cine "snuff", donde los asesinatos son auténticos.
Película sobre las malsanas consecuencias de una educación mojigata, se puede decir que fue, de alguna manera, la venganza del propio Schrader contra su familia, de estricta observancia calvinista, que no le permitió ver un solo film hasta cumplir los 18 años de edad.
Obra dura, lacerante y correosa, está convincentemente protagonizada por un George C. Scott espléndido en su complejo papel de padre atribulado. En un papel secundario aparece Dick Sargent, que años atrás se hizo muy popular, en un personaje diametralmente opuesto, como marido de Elizabeth Montgomery en la célebre serie televisiva Embrujada.
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