Pelicula:

Álvaro Brechner es un guionista, realizador de televisión y director de cine uruguayo, afincado en España desde hace años. Su primer largometraje de ficción para pantalla grande fue Mal día para pescar (2009), que nos descubrió una mirada distinta, original, fresca. Con su segundo largo, esta Kaplan (2014), confirmó las expectativas, y el tercero y último (cuando se escriben estas líneas), La noche de 12 años (2018), ha supuesto su definitivo lanzamiento internacional, habiendo sido premiado, entre otros muchos galardones, con el Goya al Mejor Guion Adaptado.

Kaplan parte de una historia original del propio Brechner: Jacobo Kaplan es un viejo octogenario judío que huyó, siendo niño, de la Alemania nazi, hasta su patria de adopción, Uruguay. Ya con las brumas de la senilidad, se entera de que en la playa de Montevideo vive un alemán también anciano, que regenta un chiringuito, y da en pensar que ese alemán de evidente corte ario es un nazi huido y camuflado en la República Oriental del Uruguay. Con Wilson, un pánfilo al que su familia contrata como conductor del viejo (ante los continuos pequeños incidentes que como tal tiene este), Jacobo busca confirmar sus sospechas, y, en caso positivo, emular al cazanazis por excelencia, Simon Wiesenthal...

Tiene Kaplan (lo de la eliminación en España del “Mr.” del título original en Uruguay es un misterio de la distribución...) un tono de comedia pero entreverado de drama. Sería entonces una dramedia, si no fuera porque a ratos puede parecer que se viste con los ropajes de la farsa. Y no le viene mal, porque en el fondo no deja de ser una versión libérrima del Quijote, con su hombre de edad avanzada que da en una suerte de demencia (en su caso por los inevitables problemas mentales de la senilidad) y con ello se siente llamado a grandes gestas, aunque aquí no confunda molinos de viento con gigantes pero sí algo parecido, más ajustado al tema del film; también tendremos a su hombre del pueblo, incluso entrado en carnes como Sancho Panza, un tipo apegado a la realidad, un pobre infeliz que, sin embargo, al lado de su Quijote, es decir, de su patrón Jacobo, dará lo mejor de sí mismo y se reivindicará como el ser humano inteligente, generoso y afectivo que en el fondo es.

Historia sobre la necesidad de mantener la dignidad y la esperanza en mejorar el mundo en el que vivimos a toda costa, incluso cuando las brumas del tiempo oscurecen la mente, Kaplan es una película que, ciertamente, reconcilia con el ser humano, aporta una visión un punto descreída pero finalmente afable, con un tono entre cómico y trágico. Brechner hace un buen trabajo como director: se le notan las tablas que adquirió como seguro profesional televisivo, y aquí da un paso más en su fiable trayectoria como cineasta.

La película no sería la misma sin los matices que le aporta la interpretación de Héctor Noguera, mítico actor chileno, respetadísimo en su país, y que de haber vivido en Inglaterra se llamaría Laurence Olivier. Noguera está espléndido en un personaje complejo, a la vez gracioso en su semilocura y trascendente en su imposible misión, pero también por ello necesaria, imprescindible misión: intentar hacer justicia con los felones que cometieron uno de los mayores genocidios (y los ha habido descomunales) que haya cometido la Humanidad. De los demás nos quedamos con el papel compuesto por Néstor Guzzini, que encuentra el punto exacto entre el Sancho Panza hedonista y el filantrópico, el que se empeñará en peripecias mayores para las que creía, erróneamente, no estar llamado ni preparado.

(29-08-2019)


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98'

Año de producción

Kaplan - by , Aug 29, 2019
3 / 5 stars
Don Quijote y Sancho en Montevideo