Vuelve José Luis Cuerda por el territorio de la farsa, donde obtuvo un sonoro éxito con El bosque animado y un no menos rotundo fracaso con Amanece, que no es poco (aunque hay a quien le parece una película "de culto").
Lamentablemente, parece que este Así en el cielo como en la tierra sigue la senda de la última. En efecto, el planteamiento de Cuerda es semejante: se trata de dar la vuelta a hechos y personajes conocidos, dándoles una apariencia casi surrealista. Y si ese retruécano se hacía con los protagonistas del Nuevo Testamento, pensaría su director y a la vez guionista, el éxito estaría asegurado, en una especie de La vida de Brian a la española.
Pero ni Cuerda tiene la gracia iconoclasta de los Monty Python, ni el atractivo de esta visión del cielo actual excede su planteamiento inicial, en el que se nos presenta un Más Allá con pinta de pueblo mesetario. Pero, agotada la inicial (y relativa) sorpresa con estas criaturas celestiales sin embargo tan cotidianas (Dios es el alcalde, San Pedro el sargento de la Guardia Civil, y así todo), se limita a sestear sobre la peregrina idea de que Dios Padre piense tener un segundo hijo, para hacer bien las cosas esta vez, o de montar un Apocalipsis de andar por casa.
Pero no se puede hacer una película simplemente con una idea más o menos brillante; hay que trabajarla después lo suficiente para que el resultado no desmerezca, por ejemplo de tan espléndido reparto.
95'