Pelicula:

El cine de las grandes “majors” sigue su idilio con la comunidad hispana en Estados Unidos. Tras el homenaje que hizo Pixar al México devoto del culto a los muertos en Coco (2017) y el musical que se marcó Warner con la comunidad latina de la Gran Manzana con la radiante En un barrio de Nueva York (2021), nos llega ahora Disney con esta Encanto (2021), que evidentemente se dirige en primer lugar a la comunidad norteamericana que habla español, la primera minoría racial por población actualmente en el país de las barras y estrellas, con más de 40 millones de hispanohablantes.

La acción se desarrolla en un país imaginario que, según dicen las gacetillas, es Colombia, aunque lo cierto es que durante el film en ningún momento se hace alusión a esa indicación geográfica. Se nos cuenta la historia de un lugar de fantasía llamado Encanto en el que, por mor de ciertos acontecimientos ocurridos en el pasado, los miembros de una familia dirigida por la abuela Alma, los Madrigal, acceden a dones sobrenaturales cuando llegan a cierta edad en su niñez. Así tenemos a la forzuda capaz de levantar una montaña con una mano, a la mujer que tiene capacidad para modificar el tiempo (aunque con sus cambios de humor a veces es el tiempo el que la persigue a ella...), el hombre que tiene la facultad de transmutarse en cualquier otra persona instantáneamente, etcétera... Todos tienen sus poderes, menos Mirabel, una adolescente quizá como de 15 ó 16 años, que en su niñez, en la ceremonia de acceso a su poder sobrenatural, no obtuvo nada, por lo que la joven está un tanto acomplejada, intentando siempre que ese dato sea lo menos conocido posible. Pero cuando la casa encantada en la que viven empieza a resquebrajarse, quizá la chica que no tenía poderes sea la que tenga que salvar a la familia y a la comunidad que depende de ella...

Puestos a buscar la clave de la historia de esta Encanto, podríamos suponer que parte del cine de individuos con superpoderes y se pregunta qué haría una persona normal que viviera en un lugar donde todos tienes esos poderes sobrenaturales. De esa pregunta nacería esta historia en la que la protagonista, un tanto traumatizada por ser la única “normal”, terminará haciendo de esa normalidad una auténtica excepcionalidad que servirá para salvarlos a todos cuando sus prójimos superpoderosos no sean capaces de hacerlo. Así que estaríamos en una especie de celebración de la normalidad, al fin y a la postre lo que somos todos, por encima de la más bien idiota adoración hacia esos superhéroes que no son sino carne de cómic, fantasías animadas de ayer y hoy (esto último solo lo entenderán los que peinen canas, o directamente no peinen nada...).

Hasta ahí bien. Otra cosa es que el desarrollo de la historia es como bastante marciana, con una resolución de lo más etérea, evanescente, en la que no sabemos ni por qué inicialmente la familia Madrigal fue bendecida con la magia de la vela que periódicamente irá regando ultrapoderes por los miembros del clan, ni por qué la casa (trasunto de la comunidad) empieza a agrietarse, ni sabemos cómo Mirabel reconstituirá la magia del lugar, ni nada de nada. Eso sí, las canciones de Lin-Manuel Miranda, el nuevo prodigio de la comunidad hispanonorteamericana, son muy bonitas y entonadas y, en línea con las que escribió para la mentada En un barrio de Nueva York, no son solo espectaculares y alegres, sino que también algunas de ellas están atravesadas de un hondo dolor poco habitual en los productos Disney.

Estamos entonces ante un hermoso espectáculo visual y sonoro, con un dibujo por ordenador realmente excepcional, en el que los movimientos, la textura de las figuras y los paisajes, incluso las tres dimensiones, están conseguidísimas, en un musical con frecuencia arrebatador, pero con una historia sustancialmente inferior al continente. Eso sí, el concepto de la casa encantada que ayuda en todo a sus miembros es un sorprendente hallazgo, y quién sabe si una posible inspiración para los ingenieros que se dedican a concebir los hogares inteligentes del futuro.

Lástima, porque el empeño era más que interesante, apostar por la gente normal, de a pie, la gente cuyo único superpoder (¡casi ná!) reside en levantarse todos los días a las 7 de la mañana para trabajar y sacar adelante a los suyos. Pero la historia dista mucho de alcanzar el notable nivel de la forma cinematográfica de esta peli de maneras excepcionales pero materia argumental más bien endeble.

De los tres directores, el más veterano y experimentado es Byron Howard, que estuvo en el departamento de animación de clásicos disneyanos de los noventa como Pocahontas o Mulan, y que, ya en el siglo XXI, dirigió dentro de la Casa del Ratón films como Enredados y Zootrópolis. Pero queremos poner el foco especialmente en la co-directora Charise Castro Smith, en su primer film como tal, en la que nos parece intuir una de las figuras emergentes de la comunidad hispana en el cine yanqui.

(03-12-2021)


Género

Nacionalidad

Duración

102'

Año de producción

Trailer

Encanto - by , Dec 03, 2021
2 / 5 stars
Cuando la normalidad es excepcional