Pelicula:

Durante el reinado de Su Graciosa Majestad la reina Victoria, Londres, la capital, se ve sacudida por varios horribles crímenes  ejecutados por un asesino al que llaman Jack el Destripador. El famoso detective Sherlock Holmes se introduce en el caso, acompañado de su inseparable doctor Watson, pero pronto empieza a sospechar que está siendo utilizado como una marioneta...

La relación de películas rodadas sobre las aventuras de Sherlock Holmes es muy larga. Desde que el cine es cine los directores se han sentido atraídos con frecuencia por la curiosa personalidad de este pintoresco detective, sagaz como un sabueso, solterón empedernido, y por la de su inseparable amigo, el doctor Watson. La anterior versión a ésta sobre el célebre detective creado por Arthur Conan Doyle fue una versión de la famosa novela El perro de Baskerville, un film que protagonizaba Doodley Moore y que tomaba al detective más bien a chacota

Esta Asesinato por decreto tiene como principal novedad, al menos a primera vista, no estar basada en un relato de Conan Doyle; si bien la cinta comienza como una tópica historia de Holmes, con un par de asesinatos truculentos y el detective que se pone en marcha, pronto se advierte que no es un caso al uso. Una amenaza se cierne constantemente sobre los dos protagonistas en sus  indagaciones, hasta el punto de hacer peligrar seriamente sus vidas. Cuando Holmes advierte que altas instancias de la nación están involucradas en los asesinatos, se podrá ver una variación sobre un tema que ha sido siempre consustancial al famoso detective, su flema británica, su frialdad a prueba de bombas.

John Hopkins, el autor del guion, escrito sobre la novela The ripper file, de Elwyn Jones y John Lloyd, nos pinta a un Sherlock atormentado por un mal paso dado en sus investigaciones y por haberse dejado manipular para la mejor conveniencia de las altas esferas del país. Unido a esto, ver al famoso detective luchar a brazo partido con el asesino es otro de los elementos originales en el siempre flemático y elegante Holmes, que habitualmente resolvía sus casos sin despeinarse, recurriendo solo a su privilegiada inteligencia.

El director, Bob Clark, conduce el relato con corrección, aunque recreándose quizá en exceso en los brumosos decorados del Londres de los barrios bajos, escenario siempre tan agradecido para este tipo de crímenes novecentistas. Es verdad que la narración adolece de ciertas lagunas, más achacables al guion que a su puesta en escena. Clark dirige con buena mano a un muy entonado grupo de estrellas, que avalan el film con su presencia; especialmente destacable nos parece la ajustada composición de James Mason como el doctor Watson. Una intervención episódica de John Gielgud sirve para confirmar su gran clase de actor indiscutible. La fotografía de Reginald Morris, como decíamos, se recrea en los paisajes sórdidos del Londres finisecular, creando una notable, a ratos incluso agobiante atmósfera de suspense.

(30-10-2022)


Asesinato por decreto - by , Oct 30, 2022
2 / 5 stars
Un Sherlock distinto