El subgénero de delincuentes tuvo cierta importancia en la España de la Transición. Fue precisamente José Antonio de la Loma el que inició este controvertido ciclo de películas interpretadas por jóvenes marginales, en un intento en principio válido de acercarse a sus vidas, a sus razones para mantenerse al margen de la ley de la sociedad. De La Loma hizo en 1977 Perros callejeros, que inauguró este subgénero, y marcó de alguna forma las reglas del juego. Después llegarían películas como Navajeros, de Eloy de la Iglesia, La patria del rata, e incluso el propio Carlos Saura se vería tentado por el tema, que tocó en Deprisa, Deprisa. Pero lo que tuvo de relativo interés la primera entrega del cineasta barcelonés, fue perdiéndose en los sucesivos y cada vez más cutres subproductos, como Perros callejeros II y Los últimos golpes del Torete. Perras callejeras fue la última incursión de José Antonio de la Loma en el tema, y lo que hizo es darle la vuelta y convertir en chicas a los que antes eran chicos al margen de la justicia. Tres muchachas, que se consideran explotadas por la sociedad, deciden cruzar la frontera de la ley y dedicarse a la delincuencia más o menos organizada. El resultado es un producto infumable, sin interés alguno. Como hecho luctuoso, por lo precoz, habrá que reseñar que la protagonista, Sonia Martínez, en su momento popular presentadora de espacios televisivos infantiles, murió años después a la temprana edad de treinta y un años, tras un grave proceso depresivo: drogas, alcohol, sida… Ya se sabe que el “caballo” no entiende de famas, ni siquiera de cronopios...
Perras callejeras -
by Enrique Colmena,
May 04, 2007
0 /
5 stars
Al margen de la ley
Uso de cookies
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.