Robin y Marian

CRITICALIA CLÁSICOS

Disponible en Filmin y Amazon Prime Video.

Más que cansados, viejos, Robin y Marian se reencuentran en una cita que ambos presagian como final. Robin, el antaño invencible arquero de Sherwood, se siente fracasado y decepcionado con su rey Ricardo a la vuelta de las Cruzadas. Marian, la hermosa dama envidiada por princesas y reinas, viste ahora hábitos monacales y se siente perseguida por la jerarquía eclesiástica.

La historia nos la cuenta Richard Lester, el director estadounidense, siempre confundido como inglés, con una carrera que regala títulos como la icónica Qué noche la de aquel día, las divertidas The knack o Golfus de Roma, la agridulce Petulia, o una curiosa variante del cine de catástrofes, El enigma se llama Juggernaut, y más tarde dobletes heterodoxos de los Mosqueteros o Superman.

Pero sin duda su mejor obra quedó marcada en esta Robin y Marian,  retrato duro y a un tiempo melancólico de la decadencia y la nostalgia de unos héroes ya fatigados, con un Robin que ahora se siente como obligado a prolongar su rivalidad con el sheriff de Nottingham... por el que  también han pasado los años, y una Marian que se refugia en sus hierbas curativas y sus pócimas, para aliviar el paso de unos días monótonos...

Y si Lester está en plena forma, es justo reconocer el trabajo espléndido de Sean Connery y Audrey Hepburn, maduros y exactos en sus retratos. En papeles secundarios el apoyo de Robert Shaw, Richad Harris, Denholm Elliott, Nicol Williamson... y Victoria Abril, como una juvenil y fogosa Isabel de Angulema, participación en una cinta, no olvidemos, rodada en tierras y castillos españoles

Un final bellísimo con Robin malherido pidiendo que lo entierren donde  caiga la flecha de su postrer disparo, mientras Marian última su brebaje para unirse en breve con su amor, más allá del tiempo y de la vida, más allá de castillos y bosques...