La más saludable postura ante esta nueva versión de El bazar de las sorpresas (1940) es olvidarse del original, por aquello de las comparaciones odiosas, especialmente cuando su precedente es una obra maestra. Afortunadamente, la directora y guionista, la ya veterana comediógrafa Nora Ephron, parece de la misma opinión, y ha utilizado la sustancia del clásico de Ernst Lubitsch para después tomar un derrotero más o menos propio, en una versión bastante libre de aquella deliciosa comedia.
Así las cosas, Tienes un e-m@il resulta ser una relativa sorpresa, una agradable película, bien construida, que juega bien con los elementos tecnológicos de fin de siglo (¡qué pintiparado para el argumento es la correspondencia "a ciegas" a través del correo electrónico!), con autonomía propia, permitiéndose, incluso, una cierta denuncia del feroz capitalismo que arrasa a los pequeños tenderos de toda la vida, a la impersonalidad del gran comercio frente al calor y la atención de "la tienda a la vuelta de la esquina" (el título original, por supuesto, de El bazar...).
Lástima que Ephron caiga en defectos tontos, como la sobada escena del ascensor averiado como catalizador de la determinación del chico, o una calculada pero excesiva morosidad en el último tercio de la cinta, cuando se entra de forma monotemática en el meollo propiamente romántico del film. Meg Ryan está estupenda, no así Tom Hanks, que parece que va "con el piloto automático"; seguramente pensará que es poco personaje para él, acostumbrado ya a roles de mucha mayor enjundia...
(07-06-2004)
119'