Enrique Colmena

En seis espléndidas entregas, con motivo del sesquicentenerio del nacimiento de los hermanos Serafín y Joaquín Álvarez Quintero, el profesor Rafael Utrera Macías ha realizado en CRITICALIA un detallado estudio sobre los escritores utreranos y su relación con el cinema. Pueden consultarse esos capítulos pinchando en cada uno de los siguientes números romanos, que se corresponden con las respectivas entregas: I, II, III, IV, V, VI.

Con este séptimo y un posterior octavo capítulo nos proponemos glosar la obra de los Álvarez Quintero que ha tenido su plasmación en audiovisuales en el extranjero, mayormente en teledramáticos y telefilms, para la antiguamente llamada “pequeña pantalla”.

Aunque es sabido que los textos quinterianos se han representado en los teatros fuera de España, en especial en Hispanoamérica, y que han sido traducidos a varios idiomas, pudiera suponerse que la obra de los dramaturgos utreranos, tan plagada de elementos localistas, esencialmente de Andalucía, y de una Andalucía eminentemente rural, tenía pocos visos de despertar interés y de ser entendida fuera de España. Sin embargo, de la amplia filmografía que la IMDb censa sobre ambos hermanos, un total de 57 títulos, entre largometrajes para cine, teleteatros y TV-movies, nada menos que 24 de esos títulos, un 42%, son de nacionalidad extranjera en su totalidad; hay algunos más que tienen coproducción con España, pero los hemos dejado de lado, al intervenir en el proyecto la nación originaria, la española, y entender, por tanto, que no cumplía con el objetivo de este texto, que no es otro que censar, comentar, glosar el amplio corpus de audiovisuales que, sobre la obra quinteriana, se ha realizado fuera de España.

A efectos de su estudio hemos dividido esos 24 títulos quinterianos totalmente foráneos en dos grandes grupos, atendiendo a su origen geográfico continental. En concreto, veremos cómo 16 de esos audiovisuales han sido producidos por estados europeos, mientras que los 8 restantes lo han sido por naciones americanas. No nos constan títulos originarios de los otros tres continentes, Asia, África y Oceanía. Aún así, que escritores de temáticas tan locales como los utreranos hayan tenido su representación audiovisual en un total de 8 países distintos al suyo original, nos parece ya ciertamente sorprendente.

Decíamos que era curioso que unos autores de temáticas tan localistas pudieran ser sin embargo entendidos fuera de nuestras fronteras, aunque también se suele decir que no hay nada más localista, y a la vez más universal, que el wéstern. Habrá que convenir que, al margen de que las historias quinterianas sean abrumadoramente de temáticas andaluzas, estas no están exentas, ni mucho menos, de universalidad, y en puridad pudieran darse en cualquier sociedad del siglo XX, como así lo atestigua el hecho de que hasta en 24 ocasiones otros países hayan decidido adaptarlas para solaz de sus conciudadanos.


EUROPA (I)

Portugal

Como quizá cabría esperar, fue la hermana Portugal (de la que se suele decir, con un punto amargamente sarcástico, que, más que vivir al lado, vivimos de espaldas, especialmente nosotros con respecto a ellos...) uno de los primeros estados que en Europa adaptaron a los Álvarez Quintero, en fecha tan temprana como 1922, todavía en la época muda del cine. La comedia (parcialmente) filmada será El centenario, bajo el título luso de O Centenário, y en realidad fue un cortometraje de 15 minutos realizado para publicitar la obra teatral que en aquella época se representaba en el Teatro Nacional de Lisboa, con dirección cinematográfica de Lino Ferreira, en lo que era una presentación de los principales actores y un esbozo bastante dilatado del argumento de esta comedia quinteriana en tres actos, cuya primera representación en España había tenido lugar en 1909, y en la que el longevo anciano centenario del título resolverá, con la razón de su experiencia y de sus muchos años, los conflictos que se plantean en su familia.

Saltamos, todavía dentro del hermano país portugués, a finales de los años cincuenta, momento en el que la Radio Televisâo Portuguesa (RTP), con la realización del veterano Fernando Frazâo, graba una telecomedia, O tambor e o guizo (1959), basada en la quinteriana Tambor y cascabel, comedia en cuatro actos, sobre una pareja sentimental tan distintos entre ellos como los instrumentos musicales del título, pero a la postre (eran los Quintero, qué caramba...) tan enamorados y compenetrados...

Un año más tarde será la propia RTP, con puesta en escena dirigida por Ruy Ferrâo, de dilatada carrera (realizó teledramáticos durante casi medio siglo), la que ponga en imágenes otra adaptación quinteriana en Mariquita Terramoto (sic) (1960), obvia versión de la comedia de los Quintero Mariquilla Terremoto, obra que los hermanos utreranos estrenaron en Madrid en 1930, inspirándose en la vida de la cantante Amalia Molina.

No será la última vez que los hermanos Álvarez Quintero aparecieran en las pantallas lusas, porque un año más tarde, de nuevo bajo la férula de la RTP, ahora con puesta en escena del también veterano y experto Herlander Peyroteo, y dentro de su espacio Ribalta, Noite de teatro, se graba la telecomedia titulada Mexericos dos irmâos Quintero (1961), que literalmente podría traducirse como “Chismorreos de los hermanos Quintero”, de 46 minutos de duración. Se trata de la adaptación de la comedia en dos actos Puebla de las Mujeres, representada por primera vez en Madrid en 1912, sobre un abogado recién llegado a un pueblo y cómo los rumores emparejan al picapleitos con una joven del lugar.


Reino Unido

No deja de ser curioso que sean los flemáticos británicos, cuyo humor parece estar en las antípodas del quinteriano, el país del mundo que más haya versionado a los escritores utreranos, y en especial algunas de sus comedias. Hasta un total de nueve títulos han sido llevados a la pequeña pantalla en el Reino Unido, títulos que han partido de materias argumentales originales de los Álvarez Quintero.

En las adaptaciones de los Quintero al universo televisivo británico hay dos nombres fundamentales sobre los que pivotan absolutamente todas las versiones realizadas: los esposos Harley y Helen Granville-Barker fueron los responsables de la adaptación al inglés de las nueve versiones quinterianas de las televisiones inglesas. Harley (1877-1946) fue un competente dramaturgo, actor y director de escena inglés cuya mayor aportación a las tablas teatrales fueron una serie de brillantes innovaciones en la representación de las obras de Shakespeare, despojándolas del pesado acartonamiento que hasta entonces era habitual; Helen (1867-1950), su segunda esposa, fue una respetada dramaturga y poeta. Ambos, buenos conocedores de la lengua española, coincidieron en su gusto por realizar traducciones de autores hispanos, y en especial de varias de las obras de los Quintero, entre ellas El centenario, Puebla de las mujeres y Fortunato, que tendrán sus correspondientes versiones en las emisoras televisivas anglosajonas.

Es ciertamente llamativo que de esas nueve producciones adaptadas a la pequeña pantalla británica, nada menos que cinco hayan sido versiones de una única comedia quinteriana, en concreto la mencionada El centenario. Así, a finales de los años treinta, cuanto la televisión británica estaba todavía casi en pañales (las emisiones comenzaron en 1936), se emite a través de la cadena estatal BBC la primera de esas cinco adaptaciones, con el título (que se mantendrá en las sucesivas producciones de la misma comedia) A hundred years old (1938), literalmente “Un hombre de cien años”, con una duración de 70 minutos, por supuesto en el blanco y negro consustancial al medio televisivo de la época.

Solo 8 años más tarde se realizará la producción de la segunda versión de El centenario. Como todas las adaptaciones en el Reino Unido, esta también se titulará A hundred years old (1946), de nuevo bajo los auspicios de la British Broadcasting Corporation, la mítica BBC, y otra vez con el texto de los Granville-Barker como base, aunque Harley moría ese mismo año en París. El reparto, como fue norma en todas estas adaptaciones, fue totalmente distinto al de la anterior. Fue emitido también en blanco y negro.

El texto de los esposos Granville-Barker vuelve a ser el utilizado para la tercera (y muy cercana en el tiempo a la anterior...) versión de El centenario: solo dos años más tarde se pudo ver en la pequeña pantalla A hundred years old (1948), ahora con una duración superior, 105 minutos, en el correspondiente blanco y negro, y con un elenco artístico totalmente diferente al de sus dos versiones anteriores.

Ya en los años cincuenta, la BBC presentaba en su parrilla de programación un espacio similar al que años más tarde se haría famoso en Televisión Española, Estudio 1. Eran obras dramáticas o cómicas adaptadas al medio televisivo, que la emisora británica programaba bajo la advocación de BBC Sunday-Night Theatre (literalmente, “BBC Domingo – Noche de teatro”). El episodio número 38 de esta serie dramática televisiva sería (cómo no...) A hundred years old (1952), otra vez sobre el texto de los Granville-Barker, cuando Helen había fallecido ya dos años antes, y de nuevo con un equipo actoral totalmente renovado.

La quinta y última vez que El centenario fue adaptado en la televisión británica BBC sería poco después, como siempre con el título A hundred years old (1954), con una duración de 90 minutos, el sempiterno blanco y negro de la época, y el texto de Harley y Helen Granville-Barker como referencia guionística, además de un elenco nuevamente distinto a todos los anteriores.

Pero como decíamos, no fue El centenario el único texto quinteriano (siempre sobre la traducción de los Granville-Barker) que se versionó en las televisiones británicas: Fortunato (1947), sobre la comedia homónima de los hermanos Álvarez Quintero, y siempre sobre la traducción de los esposos Harley (este había muerto ya el año antes, como hemos comentado) y Helen, pondrá en imágenes, con una duración de media hora, la tragicomedia que los utreranos resolvieron en tres cuadros, la historia de un pobre desgraciado al que la fortuna parece esquivar constantemente. La producción corrió a cargo de la estatal BBC.

Armchair Theatre fue el nombre con el que se conoció un espacio televisivo inglés que se mantuvo en antena desde 1956 hasta 1974, siempre emitido por la cadena privada Independent Television, la popular ITV. En ese espacio, concretamente en su episodio número 43, encontraremos una nueva versión quinteriana, por supuesto, como siempre, en la traducción de los Granville-Barker: The women have their way (1957), que se podría traducir como “las mujeres se salen con la suya”, será el peculiar título de la versión británica de Puebla de las mujeres, con dirección de  George More O’Ferrall, experto realizador de la casa, y con producción de la ABC Weekend Television, emitida en blanco y negro, y siempre, como era habitual en el espacio Armchair Theatre, en la noche del domingo.

Ese mismo año, aunque ahora en la cadena estatal BBC, se emitirá la última adaptación de un texto quinteriano en el Reino Unido. Se trata de Doña Clarines (1957), que mantuvo el título original de esta comedia en dos actos de los hermanos Álvarez Quintero, la historia de una vieja un tanto chiflada, famosa (y por ello temible...) por decir exactamente lo que piensa, cualidad no precisamente la mejor para la convivencia social. Por supuesto realizada sobre la traducción de los esposos Granville-Barker, el teledramático tuvo una duración de una hora y se emitió en blanco y negro.


Italia

Si Portugal fue tempranero en adaptar a los Quintero a la gran pantalla, aún lo fueron más nuestros vecinos más lejanos de Italia; hablamos concretamente de la producción de la empresa Caesar Film titulada Anima allegra (1919), adaptación de El genio alegre, comedia en tres actos que tuvo su primera representación pública fuera de España, en Buenos Aires, en 1906. La versión cinematográfica italiana estuvo dirigida por el pionero Roberto Roberti, y llegó a estrenarse también en España, con el título El genio alegre. Al frente del reparto aparecía la diva Francesca Bertini, una de las grandes estrellas del cine itálico del cine mudo, interpretando el papel principal, esa polvorilla que será un revulsivo en la sobria casa solariega de su tía.

Ilustración: Una imagen de Mexericos dos irmâos Quintero (1961), adaptación televisiva portuguesa de la comedia Puebla de las mujeres.

Próximo capítulo: The Quinteros abroad: la obra de los hermanos Álvarez Quintero en el audiovisual extranjero. Holanda, Yugoslavia, Argentina, México, Canadá  (y VIII)